Aire puro

Imagina un destino que desconoces. Un lugar en el que tus sentidos se rinden espontáneamente ante un lugar que te ofrece una estancia sin igual. Para los trotamundos de gran nivel, el hotel al que llegan es de esencial importancia.

La ubicación, el interiorismo, las amenidades, servicios y gastronomía, son los factores que generan el ambiente ideal para disfrutar al máximo de la estancia en el destino elegido. Te presentamos  una opción que puedes gozar. Es una muestra de la hotelería que todo viajero hedonista debe disfrutar.

Disfruta de la vida de Lansdowne Resort and Spa, que se extiende a través de 476 acres a lo largo de las orillas del río Potomac en Leesburg, Virginia en los Estados Unidos. Rico en historia y a la entrada de la región vinícola, el resort crea un ambiente singular conectado con la naturaleza y el lugar en la que se encuentra.

Descubre experiencias gastronómicas, como el restaurante Coton & Rye, que ofrece las delicias locales y artesanales. En el hotel, los pasatiempos recreacionales están a la orden del día: ver el amanecer en una clase de yoga, jugar golf o footgolf en los tres campos que tiene y relajarse en el spa con tratamientos que están inspirados con ingredientes locales como el masaje de vinoterapia que brinda una experiencia inolvidable.