Como dice el viejo dicho: “una manzana al día, del médico te libraría”, es un sabio consejo porque esta fruta brinda el 20 % del valor diario recomendado de fibra dietaría, 8 % de vitamina C antioxidante y 7 % del potasio diario, todo por tan solo 130 calorías, ¡sin grasas, sin sodio y sin colesterol! Convirtiéndola en una súper fruta.
Es uno de los frutos más poderosos por la cantidad de nutrientes que posee, además tiene propiedades diuréticas importantes. En este sentido, es un alimento rico y ligero que podría aportar grandes beneficios a la salud de los mexicanos, una de las razones es su cáscara, pues es donde se concentran mayor parte de sus cualidades.
Esta parte de la manzana contiene una gran cantidad de fibra, la cual favorece la sensación de saciedad y podría ayudar a nivelar la glucosa en la sangre, pero eso no es todo, al concentrar antioxidantes también podría ayudar a prevenir el envejecimiento prematuro y a recuperar tus músculos después de hacer ejercicio.
La mejor manera de disfrutar de una manzana es, literalmente, a mordidas; sin embargo, reconociendo lo poderosa y maravillosa que es la cáscara por si sola, Manzanas Washington te comparte tres formas de disfrutarla que son fáciles de preparar.
Enriquece tus licuados: Las mañanas pueden ser muy complicadas por las prisas de comenzar nuestras actividades diarias causando ayuno, pero esto puede resolverse con un licuado que contenga cáscara de manzana. De esta manera, tendrás la energía y fibra necesaria para arrancar el día cuidando tu salud de manera integral.
Decora tus ensaladas: el verano es una de las épocas más calurosas del año, por eso se nos antoja comer platillos frescos. La mejor opción es tu ensalada favorita coronada con tiras finas de cáscara de manzana, con ella no solo añadirás color, textura y sabor, sino que también podrías favorecer tu tránsito intestinal.
Té de manzana con cáscara y canela: Por la tarde noche, tras acabar nuestras actividades siempre es bueno tomarnos un tiempo para relajarnos y consentirnos. La mejor forma de hacerlo es con un té, el cual, si va con cáscara de manzana, es mejor porque fortalece el sistema inmunológico, favorecer la salud cardiovascular y mantiene los niveles de azúcar en la sangre.
Las manzanas frescas y enteras ofrecen la mayor cantidad de nutrientes. Desechar la piel elimina gran parte de la fibra, por ello lo ideal es consumirlas enteras, pero, si por alguna razón tuviste que pelarlas, recuerda: ¡no deseches la cáscara! Puedes aprovecharla de otras formas.