6,300 nuevos casos de cáncer de hígado en México por año

  • Los virus de la hepatitis B o C, hígado graso y cirrosis, son las principales enfermedades que pueden causar el cáncer de hígado.
  • En México, cada año se registran alrededor de 2,919 defunciones en hombres y 3,149 en mujeres por este tipo de cáncer.

El carcinoma hepatocelular (HCC por sus siglas en inglés) o mejor conocido como cáncer de hígado, es la enfermedad más silenciosa del hígado. Cada año, esta neoplasia cobra la vida de 746,000 personas en el mundo, según cifras de Globocan y ocupa el quinto lugar a nivel mundial entre los tumores de cáncer malignos. En México, este tipo de cáncer es la tercera causa de muerte en mujeres con 3,149 casos por año y la cuarta causa en hombres con 2,919 defunciones1.

Esta neoplasia se origina cuando las células de este órgano se hacen anormales y crecen más rápido hasta formar un tumor. Existen dos tipos de cáncer de hígado. El primero, cuando las células que forman el tumor son del hígado y el segundo, cuando las células cancerígenas provienen de un tumor originado en otra parte del cuerpo.

Varios casos de cáncer de hígado están relacionados con los virus de la hepatitis B o C, pero muchas personas no saben que tienen el virus. A su vez, tener hígado graso o padecer de cirrosis (por alcohol o hígado graso), son factores de riesgo que determinan la existencia de este cáncer2.

Para conmemorar el Día de la Salud Hepática, la Asociación Mexicana de Lucha Contra el Cáncer A.C. (AMLCC) y la Fundación Mexicana para la Salud Hepática (FundHepa), unen esfuerzos este año para concientizar a la población mexicana sobre los factores de riesgo relacionados con el cáncer de hígado, así como fomentar la detección temprana de las enfermedades hepáticas que, en muchas ocasiones, no se atienden a tiempo y pueden desencadenar este tipo de cáncer.

Estudio internacionales afirman que una vez diagnosticado el carcinoma hepatocelular (HCC), la sobrevida a 5 años sin un tratamiento adecuado es menor al 5%. Esto se debe en gran medida a que las enfermedades crónicas inflamatorias como la hepatitis B o C representan entre el 90 y 95% de probabilidad para desarrollar HCC. No obstante, la cirrosis tiene un factor del 80% de posibilidad para causar el cáncer de hígado3.

De acuerdo con (Especialista médico en Cáncer de Hígado), el cáncer de hígado se puede prevenir a tiempo, con acciones como vacunarse contra la hepatitis B, realizar prueba examen de detección de hepatitis C, evitar y tratar

oportunamente las infecciones por hepatitis, moderar el consumo de alcohol, limitar el tabaco y tener una alimentación equilibrada y peso saludable que a su vez, ayudan a prevenir padecimientos como la diabetes y la obesidad. Estas dos enfermedades también son un alto factor de riesgo actualmente para desarrollar cáncer de hígado.

En vista de que el hígado es un órgano que trabaja en silencio y por tal motivo no duele o no se sabe si está enfermo, las personas suelen crear mitos y desinformación sobre el estado de salud de su hígado.  En este sentido, la (representante de Fundhepa) explicó que la población aún piensa que la cirrosis solo da por abuso del alcohol, cuando se ha demostrado que un paciente diagnosticado con hígado graso también puede desarrollar cirrosis; se le conoce como “hígado graso no alcohólico”. Otro gran mito es creer que las hierbas o remedios naturales cuidan mejor el hígado que los fármacos y además, previenen o curan el cáncer. “Los productos naturales tienen sustancias químicas, al igual que las sintéticas, el hígado también las procesa y el uso excesivo de éstas puede dañarlo. Se ha demostrado que existen remedios herbales tóxicos que pueden causar daño hepático severo”, enfatizó  la (representante de Fundhepa).

Por su parte, Mayra Galindo, Directora General de la AMLCC, comentó que “las organizaciones civiles continúan trabajando por mejorar la detección temprana y el acceso oportuno a una atención multidisciplinaria y especializada, así como al mejor tratamiento en tiempo y forma para atender no solo el cáncer, sino también, aquellas complicaciones de salud que determinan el futuro de cada paciente”.