Si bien es cierto que en la Ciudad de México ha crecido la oferta gastronómica, son pocos los lugares que conjugan la ubicación, el interiorismo, el ambiente y lo mejor, el match perfecto con platillos y cocteles singulares, además del servicio.
Y es el caso de Sonia Restaurante, que conjuga todo los factores clave para vivirlo, una y otra vez. Sí, ahí, tan cercano de Paseo de La Reforma y tan íntimo, ubicado Oxford 23 en la colonia Juárez, en él pareciera que se estuviera en un oasis en el que la complicidad del sabor se complementa con un diseño propositivo y lo mejor, para disfrutar sin tiempo y deleitándose con un menú que sorprende.
Su ambiente es cosmopolita. Jóvenes sibaritas, conocedores gastronómicos y parejas asiduos a cartas singulares o grupos de amigos, se dan cita en lo que es el resultado de un proyecto gastronómico que emerge en tiempos de pandemia, pero que gracias a sus sabores y atención, ha logrado fincarse como un spot del buen comer. Con recetas inspiradas en los platillos de las abuelas, el menú se adereza de comida contemporánea de primer nivel.
Una casona resguarda este tesoro que recuerda al hogar de cada uno. Desde la decoración, el contraste cromático y la vajilla craqueladas, que son una clara referencia vintage,un mix and mach con gran tino.
La carta de Sonia Restaurante contempla entradas como la picadita de pulpo, la alcachofa grillada con mantequilla de ajo o el taco de papada. En sus platos fuertes se pueden encontrar: el pulpo a la Mario, la totoaba de criadero con babaganoush de berenjenas o el churrasquito Emilia. Para terminar, se incluyen postres como el camote en tacha, la berlinesa de crema de mascarpone o la Pavlova de frutos rojos.
La selección de vinos, con más de 50 entradas, es cuidada y contiene etiquetas no comunes. Así resulta el lugar ideal para los conocedores de etiquetas de carácter mundial y exclusivo.
Un punto diferenciador es la tendencia es buscar a productores pequeños, referencias interesantes y diferentes que enriquecen la cocina de Sonia, que está a cargo de Edgar Delgado, formado en San Sebastián, con paso desde cocina de estrella Michelin hasta bares de tapas. Su expertise se nota en cada bocado de los platillos.
Además, existe el factor sorpresa, gracias a la temporalidad de los ingredientes que se utilizan como insumos, los platillos cambian dependiendo de la existencia o ausencia de éstos. ¿Un ejemplo? El pescado proviene de productores con técnicas responsables, el pan y el helado que se sirven son hechos en casa.
¿En verdad quieres quedar bien en una cita y degustar platillos deliciosos? No lo dudes, reserva en Sonia Restaurante y será una comida o velada memorable.